Los recién nacidos tienen estómagos diminutos y necesitan alimentarse con frecuencia. Durante las primeras semanas, es posible que tengas que despertar a tu bebé para alimentarlo. Observa las señales de hambre de tu bebé. Te indicarán cuándo tiene hambre y está lleno.
La alimentación pausada con biberón es importante para que el bebé pueda hacerte notar que está satisfecho o lleno. Para obtener más información, consulta a tu nutricionista o consejero/a de lactancia de madre a madre de WIC.
Los recién nacidos lactan a lo largo del día y la noche unas 8 a 12 veces en 24 horas.
No tienen horario y les encanta alimentarse con frecuencia. Tanto si el bebé lacta como si se alimenta con leche materna extraída, aliméntalo a demanda, cuando muestre signos de hambre.
Durante los primeros días, la mayoría de los recién nacidos necesitan 2 o 3 oz de fórmula cada 3 o 4 horas.
Al final del primer mes, el recién nacido necesita unas 4 oz cada 4 horas.
No hay problema si tu bebé no termina todo el biberón, deja que te indique cuándo está lleno.
Antes de que le salgan los dientes, límpiale las encías con un paño suave y limpio después de alimentarlo, especialmente antes de dormir.
Amamanta a tu bebé a demanda, unas 7 a 9 veces en 24 horas.
A los bebés les encanta mirar a su alrededor a esta edad. Busca un lugar tranquilo o una habitación más oscura para amamantar a tu bebé si está distraído.
Tu bebé necesita unas 4 a 6 oz de fórmula cada 3 o 4 horas.
De 25 a 45 oz en 24 horas. Es posible que tu bebé empiece a alimentarse siguiendo un horario. En lugar de centrarte en cantidades fijas, deja que tu bebé te indique cuándo está lleno.
Cuando empieces a darle alimentos sólidos, hazlo siempre con un bol y una cuchara para que tu bebé aprenda a comer bien.
Nunca pongas cereales u otros sólidos en el biberón. Los sólidos en el biberón no ayudarán a tu bebé a dormir toda la noche y pueden causar asfixia u otros problemas de salud.
Sigue amamantando a tu bebé a demanda, unas 4 a 6 veces en 24 horas.
Los bebés pueden experimentar un crecimiento repentino alrededor de los 6 meses y pueden alimentarse con más frecuencia.
Prueba dándole leche materna en un vaso.
Tu bebé necesita unas 6 a 8 oz de fórmula cada 4 o 5 horas.
De 24 a 32 oz al día. Para iniciar el proceso de destete, comienza a ofrecerle la fórmula en un vaso.
Utiliza leche materna o fórmula para preparar de 2 a 4 cdas. de cereal para bebés fortificado con hierro. Dáselo dos veces al día.
2 a 4 cdas. de trozos pequeños de pan seco, galletas para bebés y cereales. Puedes darle a tu bebé alimentos para comer con la mano cuando esté preparado, alrededor de los 8 meses. Cuando esté listo, ofréceselo dos veces al día.
4 a 8 cdas. al día.
Vegetales cocidos, triturados o hechos puré.
4 a 8 cdas. al día.
Frutas cocidas, trituradas o hechas puré. Puré de manzana, puré de melocotones o puré de plátano.
2 a 4 cdas. al día.
Carnes, aves de corral, huevos, pescados o legumbres desmechados, triturados o hechos puré sin sazonar.
Puedes darle yogur cremoso de leche entera.
Los bebés sienten una curiosidad natural por los alimentos nuevos. Si a tu bebé no le gusta un alimento nuevo en el primer intento, ofréceselo de nuevo en otro momento. Los bebés aprenden sobre la comida oliendo, probando y tocando. Es posible que tengas que ofrecérselo 10 veces antes de que lo coma.
La leche materna es la fuente de alimentación más importante para tu bebé, incluso después de que empieces a ofrecerle alimentos sólidos.
Sigue amamantando a tu bebé a demanda, 3 o más veces al día.
Tu bebé necesita unas 6 a 8 oz de fórmula 3 veces al día.
De 16 a 24 oz al día. Sigue ofreciéndole la fórmula en un vaso. Tu bebé debería dejar el biberón a los 12 meses.
4 a 8 cdas. al día.
Cereal para bebés fortificado con hierro.
Trozos muy pequeños de tostadas secas, galletas saladas, pan, bagels, panecillos, cereales secos sin azúcar o magdalenas/muffins simples.
Arroz y fideos cocidos.
8 a 12 cdas. al día.
Trozos muy pequeños de vegetales cocidos.
8 a 12 cdas. al día.
Frutas frescas, peladas y en trozos muy pequeños.
4 a 8 cdas. al día.
Carnes, aves de corral, huevos, pescados finamente molidos, picados o cortados en cubos, y puré de frijoles cocidos.
Alrededor de las 2 o 3 semanas, las 6 semanas, los 3 meses y los 6 meses, los bebés pueden experimentar un crecimiento repentino y pueden alimentarse con más frecuencia durante estos períodos.
A medida que crecen, los bebés pueden contener más leche, por lo que el dar de comer puede ser más espaciado y durar menos tiempo.
Para evitar que tu bebé se asfixie, sujétalo siempre cuando lo alimentes. Nunca uses una almohada o cobija para apoyar el biberón mientras el bebé come.
Empieza a ofrecerle leche entera a tu bebé cuando tenga un año.
La American Academy of Pediatrics recomienda la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses y que la lactancia materna continúe durante al menos 12 meses y más. Los bebés que son amamantados necesitan vitamina D. Consulta con el médico de tu bebé sobre la ingesta de suplementos.
Ofrécele alimentos sólidos a tu bebé una vez que:
Ofrécele a tu bebé una variedad de cereales de grano (avena, cebada y arroz). Los cereales de arroz pueden tener arsénico, por lo que ofrecerle diferentes tipos de cereales es saludable para tu bebé.
Prueba un alimento nuevo a la vez. Espera 5 días antes de darle otro alimento nuevo para observar si experimenta alergias. Las alergias a los alimentos pueden incluir sibilancias, sarpullido o diarrea.
Para ayudar a reducir el riesgo de alergias de tu bebé, consulta con su médico sobre la introducción de cacahuates/maní, huevos u otros alimentos alergénicos antes de que tu bebé cumpla 6 meses.
Los bebés menores de un año no deben ingerir miel, ni alimentos con miel, ni alimentos que puedan provocar asfixia como frutos secos enteros o uvas enteras.
Una vez que tu bebé haya empezado a comer sólidos, es una buena opción darle una pequeña cantidad de agua en un vaso a la hora de las comidas. Tu bebé no debe tomar jugos ni bebidas con azúcares antes de cumplir un año.
La alimentación saludable empieza a temprana edad. Ofrécele una variedad de todos los grupos de alimentos.
Evita alimentos y bebidas altos en sodio o con azúcares añadidos para mantener su bebé sano.
Todos los bebés son diferentes. Consulta a un proveedor de atención médica de WIC o al médico de tu bebé sobre sus necesidades.